SAN SALVADOR, 25 DE OCTUBRE DE 2011. (INTERJUST). El Juzgado 10° de Paz decretó instrucción formal con detención provisional para Gustavo Alfredo Barrientos Fajardo de 35 años de edad y a Wendy Xiomara Ramírez Cañas de 33 años por el delito de estafa agravada, en perjuicio de Leticia de 82 años e Inés de 88. Además se les atribuye el delito de falsedad ideológica en perjuicio de la fe pública.
En la audiencia inicial el juez valoró los elementos indiciarios como suficientes para enviar a los acusados, quien era el sobrino y la empleada domestica de las ofendidas, a un centro penitenciario.
Mientras que a Norberto Antonio Rivas, de 33 años y Rosa Rivas, de 58, acusados de privación de libertad y hurto en prejuicio de las los mujeres, el Juez decretó instrucción sin ninguna medida cautelar, pues valoró y determinó que no había indicios suficientes para decretar una detención provisional, pero los cuatro acusados pasarán a la siguiente etapa en el Juzgado 10° de Instrucción.
De acuerdo con la acusación presentada por la Fiscalía General de la República (FGR) el sobrino de las señoras, presuntamente valiéndose de un Poder obtenido de forma fraudulenta hizo transacciones bancarias a su favor, despojándole a las víctimas un monto aproximado de 130 mil dólares de los Estados Unidos de América, dinero que poseían por sus ahorros, cuentas a plazo y pensiones.
Según el requerimiento fiscal, el día 14 de noviembre del año 2010 las octogenarias fueron encontradas y rescatadas por un vecino después de estar unas 48 horas sin alimentarse. Las señoras al lograr salir se refugiaron donde una vecina a quien le contaron lo que sucedido y así fue que hicieron la denuncia a una delegación policial.
Wendy Ramírez era la empleada de confianza de las víctimas desde hace más de 20 años, sus funciones eran cuidar de la salud y según la denuncia ésta no las dejaba salir, las maltrataban y al parecer las sedaba
Presuntamente el imputado Barrientos a través de un Poder con amplias facultades, elaborado el 4 de febrero de 2010 y donde tenía las huellas de una de las víctimas, debido a que no podía firmar por la inmovilidad de su brazo derecho, comenzó a retirar cantidades de dinero de la cuenta de su tía así como una serie de transacciones bancarias, cancelaciones de depósitos a plazo y traspasos de propiedades a favor de la imputada Wendy Ramírez, esto a partir de esta fecha.
Días antes de elaborar el Poder, el 22 de enero de ese mismo año, la ofendida sufrió un atentado delictivo al llegar a su casa cuando venía de realizar una transacción bancaria, un sujeto la esperaba y le hirió el brazo derecho con un arma de fuego, perdiendo la movilidad de dicha extremidad.
mm/Interjust
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