miércoles, 27 de octubre de 2010

SOBREVIVIENTE Y “TESTIGO” DECLARAN EN CASO MASACRE MICROBÚS

SAN SALVADOR, 27 DE OCTUBRE DE 2010 (INTERJUST). El Juzgado 1º de Menores recibió este miércoles las declaraciones de un sobreviviente y del testigo bajo régimen de protección “Andrea” contra dos adolescentes, de 15 y 16 años, acusados de homicidios agravados, homicidios agravados tentados, lesiones y daños en perjuicio de varias personas y de un microbús del transporte colectivo.

Uno de los fiscales manifestó que el testigo ubica a los imputados en el momento de la planeación y del cometimiento de los hechos en una participación directa de ambos. Confirma la tesis de la Fiscalía General de la República (FGR) de todos los peritos, forenses, balísticos y agentes del Servicio de Emergencias 911 de la Policía Nacional Civil (PNC).

Para mañana no habrá actividad en esta vista de la causa, sin embargo este próximo viernes 29 continuará con más declaraciones de agentes captores y los debates finales. Se espera que ese día finalice la vista de causa y que la jueza, Lorena de Morales, dé a conocer la resolución contra los dos menores involucrados en estos crímenes.

Los involucrados, cuyos sobrenombres son “El Güilita”, de 14 años, y “El Gárgola”, de 16, fueron trasladados al juzgado con grilletes y esposas, como parte de las medidas de seguridad. La diligencia está programada para que concluya este próximo 29 de octubre; sin embargo, se desconoce si ese día se dará a conocer la resolución de la vista de causa.

Los acusados son presuntos miembros activos de la pandilla “18”, quienes fueron capturados por la madrugada del pasado 21 de junio, después de haber participado, supuestamente, en la masacre de 17 pasajeros de un microbús de la ruta 47.

Los hechos se registraron a eso de las 7:30 p.m. del 20 de junio de este año, sobre la Avenida Castro Morán del municipio de Mejicanos, cuando, afirman testigos, presuntos miembros de la referida pandilla detuvieron el automotor y procedieron a rociar con gasolina a los ocupantes, les prendieron en llamas y, a los que intentaban escapar, les dispararon. De esto se acusa al menor de 16 años, mientras que el otro es señalado como colaborador.

Actualmente los menores guardan resguardo en el Centro de Internamiento de Ahuachapán. La Policía Nacional Civil (PNC) montó un operativo hasta que se detuvieron a unos adultos y a los dos adolescentes. Si al final de la diligencia se logra establecer la responsabilidad contra el joven de 16 años podría purgar una medida máxima de hasta 15 años de internamiento.

c.m./Interjust

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