LUNES AUDIENCIA INICIAL POR ASESINATO DE ROQUE DALTON

SAN SALVADOR, 06 DE ENERO DE 2011. (INTERJUST). El Juzgado 9° de Paz realizará el próximo lunes 9 de enero a las 8:30 a.m. audiencia inicial contra Joaquín Villalobos Huezo y Jorge Alberto Meléndez, acusados de asesinar presuntamente a Roque Antonio García, de 39 años conocido como Roque Dalton.
Sin embargo el Ministerio Público Fiscal ha solicitado al juez Romeo Giammattei decrete sobreseimiento definitivo a favor de los acusados por ser improcedente la promoción de la acción penal contra los denunciados.
De acuerdo al requerimiento fiscal presentado por la Fiscalía General de la República (FGR) los hechos fueron expuestos por medio de denuncia escrita por los señores Juan José Dalton y Jorge Dalton, hijos del fallecido, donde manifiestan que el día 10 de mayo de 1975, su padre Roque Dalton fue asesinado por sus compañeros de la organización guerrillera denominada Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP)
Según la denuncia de los familiares de la víctima, ésta fue capturada el 13 de abril de ese mismo año por sus compañeros de la organización y lo señalaban de instigar su compañero Armando Artega, (líder del ERP, quien además fue capturado), para que adoptara una conducta de rebeldía dentro de la organización e impulsara un complot contra su Estado Mayor.
Ambos permanecieron detenidos en una casa de seguridad del ERP ubicada en el Barrio Santa Anita de la ciudad de San Salvador. Días antes, Vladimir Rigel uno de los 4 máximos dirigentes de esa organización en esa época, en un ataque de furia dio patadas a las víctimas y se les sentenciaron a muerte.
Además, tal denuncia hace referencia de dos lugares donde presuntamente fue sepultado los restos de Roque Dalton, una en el Barrio Santa Anita y otra en El Playón, en el Departamento de la Libertad.
Según el relato de la denuncia los cuerpos fueron enterrados a poca profundidad y fueron devorados por los animales y luego los restos fueron tirados en una quebrada cercana por un juez y la extinta Guardia Nacional, asegura la acusación.




mm/Interjust