SAN SALVADOR, 24 DE NOVIEMBRE DE 2010 (INTERJUST). El Juzgado 8º de Paz decretó instrucción formal con detención provisional contra los imputados José Fernando Núñez Navas, de 33 años de edad, y Amadeo Cerón Rivas, de 47.
El primero es acusado de fabricación, portación, tenencia o comercio ilegal de arma de fuego o explosivos caseros o artesanales, mientras que ambos son acusados de posesión y tenencia con fines de tráfico y agrupaciones ilícitas en perjuicio de la salud y la paz pública, respectivamente.
El juez, Carlos Edgardo José Bendix, resolvió basado en los indicios presentados por la Fiscalía General de la República (FGR); sin embargo, por el ilícito de agrupaciones ilícitas los sobreseyó definitivamente. Asimismo, el suscrito ordenó que el proceso pase al Juzgado 8º de Instrucción, mientras que Núñez pasará al Centro Penal de Apanteos y Cerón Rivas al Centro Penal en San Vicente.
Según el requerimiento fiscal, una llamada anónima a la Policía Nacional Civil (PNC) fue la que alertó que el pasado 19 de noviembre los imputados presuntamente harían una transacción de material explosivo conocido como C-4 en la gasolinera Shell, ubicada sobre la Alameda Juan Pablo II, en las cercanía del Parque Infantil de San Salvador.
Con el fin de verificar la información se montó en el lugar un dispositivo de vigilancia percatándose de la presencia de dos sujetos que coincidían con las características proporcionadas; sin embargo éstos al ver la presencia policial se retiraron del lugar.
Uno de ellos ingresó a las instalaciones de la delegación centro de la PNC y el otro entró a un restaurante de Pollo Campero.
Los investigadores le dieron seguimiento al sujeto que entró a la delegación policial donde lo detuvieron, detalla la investigación. Asimismo, le practicaron una requisa personal ya que, al parecer, el imputado dejó un paquete con envoltorio verde olivo encima de un escritorio secretarial. Cuando se verificó su contenido, las autoridades descubrieron que se trataba de un explosivo y cuatro cápsulas detonantes que son de uso militar.
El material fue analizado por técnicos en explosivos de la corporación, quienes después dictaminaron que el material incautado presuntamente al acusado es un explosivo del tipo C-4.
De acuerdo a la acusación fiscal, al agente también le encontraron 130 porciones pequeñas de sustancia sólida envueltas en plástico, presuntamente en un depósito de un armario asignado a él y que, según la prueba de campo, resultó positiva a la cocaína.
La segunda captura se realizó al interior del restaurante, ubicado sobre la 5ª Calle Poniente y Alameda Juan Pablo II, donde al imputado se le encontró presuntamente una porción de marihuana.
a.s./c.m./Interjust
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